viernes, 6 de febrero de 2015

Edulcorantes

Pues aquí estoy de nuevo, esta vez, intentando resolver la pregunta de Noemí sobre el consumo de azúcar y edulcorantes.

La verdad, es que para el primer post que me sugerís,¡ me habéis puesto un tema bien difícil y comprometido!

El tema de los edulcorantes, es un tema que ha estado siempre rodeado de dudas y polémicas, y que cuando parecía estar más o menos claro, ¡¡Sale un nuevo estudio que vuelve a poner todo patas arriba!!

Para comenzar el post, empezaremos hablando de lo que es un edulcorante; es una sustancia que se usa en lugar de la sacarosa, que es el nombre del azúcar de mesa, para endulzar tanto comidas como bebidas.
Hay muchos tipos de edulcorantes, pero nos vamos a centrar en los principales edulcorantes acalóricos (que no tienen kcal) ; haciendo una distinción general:
  •  Naturales. Stevia
  • Artificiales. Sacarina, aspartamo, sucralosa.

Aporte calórico

El azúcar, al ser un hidrato de carbono simple, nos aporta 4 kcal por cada gramo; sin embargo, cualquiera de los edulcorantes citados anteriormente, no aportan valor calórico, es decir, no engordan.

Aquí nos encontramos con el primer uso; en dietas para adelgazar.



Problemas pasados de los edulcorantes

Sin embargo, seguro que todos habéis oído que si los edulcorantes artificiales son malos, que si provocan cáncer, etc.

De manera muy general, os voy a detallar la evolución de cada uno de los edulcorantes:
  • Sacarina. En el año 1970, se realizó un estudio en EEUU que relacionó el consumo de sacarina en ratas con cáncer de vejiga; a partir de este estudio, se obligó a poner en todos los alimentos y bebidas que contuviesen sacarina la advertencia “Causa cáncer en animales de laboratorio”, lo cual, evidentemente, provocó un descenso en su consumo. Sin embargo, en el año 2000, otro estudio anuló dichas investigaciones, al descubrir que los tumores en las ratas estaban provocados por unos mecanismos que no eran aplicables en el ser humano.
  • Aspartamo. Este edulcorante, fue aprobado por la FDA en el año 1981, después de que se demostrase que no provocaba cáncer ni ningún efecto adverso en animales (imaginaos el caos que había en esa época debido al cáncer de vejiga que se suponía que causaba la sacarina). Sin embargo, en el año 1996, se realizó un estudio que determinaba que había un aumento de tumores cerebrales hasta el año 1992, el cual pensaron que podía tener relación con el consumo de aspartamo. Otra vez más, un tercer estudio, demostró que este aumento de cáncer del sistema nervioso central y del cerebro comenzó en el año 1973, es decir, 8 años antes de la comercialización del aspartamo.
  • Sucralosa. El último edulcorante artificial del que hemos dicho que íbamos a hablar, este se aprobó en el año 1999, y después de tanta polémica, se realizaron más de 100 estudios sobre posibles efectos adversos y cáncer antes de su autorización, resultando todos ellos negativos.





Aplicaciones de los edulcorantes

Pues bien, una vez solucionados los problemas que causaban los edulcorantes, y demostrándose que no podían causar cáncer; se comenzó a extender su uso.

Todos conocemos las bebidas light, o los alimentos light; no todo lo light significa que tenga edulcorante en lugar de azúcar; pero en el caso de las bebidas, es bastante amplio el concepto.

Además de la citada utilización como sustitutivo del azúcar para perder peso; a los edulcorantes se les ha atribuido más usos, como pueden ser, evitar las caries, o controlar el nivel de azúcar en el caso de pacientes diabéticos.



¡¡Ya tenemos 3 aplicaciones y muchos estudios demostrando que los edulcorantes no provocan cáncer!!

Investigaciones recientes

Sin embargo, no todo podía ser un camino de rosas; y en el año 2014, en Israel, se realiza un estudio con edulcorantes artificiales (No incluye el Stevia)  cuyas conclusiones son que los edulcorantes alteran la flora intestinal de nuestro organismo, debido a que no son digeridos por el tracto digestivo, y llegan intactos al intestino.



Ejerciendo una acción sobre todo sobre 2 tipos de bacterias:
  • Disminuyendo las Bacteroidetes; bacteria que controla la obesidad.
  • Aumentando las Firmicutes

Obteniendo de esta manera 2 conclusiones, por un lado, si disminuimos la Bacteroidetes, estamos aumentando la probabilidad de obesidad.

Y por otro lado, alterando la flora intestinal estamos alterando la capacidad de regulación de azúcar en sangre, produciendo un aumento de este nivel y pudiendo, por tanto,  provocar un aumento de la incidencia de diabetes.

Conclusiones

¡¡Pues ahora si que es un lio!! ¿¿En qué quedamos??



La primera conclusión es que aún necesitamos muchos estudios para evaluar y contrastar los datos obtenidos por el último estudio citado.

Aún así, dicho estudio, está realizado con un consumo alto de edulcorantes.

Como conclusión final, si no hay patologías previas, no habría problema en utilizar los edulcorantes artificiales de manera RESPONSABLE y sin abusar. 

Y mientras tanto… ¡Seguiremos esperando la publicación de nuevos estudios que nos aclaren un poco más el tema a todos!


1 comentario:

  1. Guauhhhhhhh!!!! Muy muy bueno el post!!! Muchísimas gracias por escribir sobre este tema tan difícil. Me ha encantado!!! Ante la duda si tuviera que utilizar un edulcorante, que ya sabes no es mi caso, me decantaría por la Stevia.... Por sí acaso jijiji. Mil gracias Alba y buenísimo trabajo.

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